Empezamos con nuestro currículo académico, a modo de carrera de cuchivilus: cada carril se corresponde con un tema tratado (un total de ocho temas: espacios de oportunidad, espacio público, prologo vs. no logo, sistemas de comunicación, gestión de recursos, interferencias extradisciplinares, medida real y relativa y economía de subsistencia). El porcentaje de color de cada tema en cada carril tiene que ver con la intensidad con la que cada uno de los componentes del grupo ha trabajado ese tema. Los resultados finales avisan de los temas que se seguirán desarrollando, y de los que se abandonarán...


Imagen intuitiva sobre el nuevo paisaje a crear en la plataforma Cuchiville. Más información sobre los artistas que inspiraron esta imágen > Bernd and Hilla Becher


EL PINTOR
.
Los postigos estaban cerrados. El pintor, suspendido, escruta el acantilado. Desde su hermético estudio, las vistas son espectaculares, siempre únicas. Lenguas de vaca aparecen proyectadas en su lienzo desde la ventana convertida en daguerrotipo. Al alejarse de los estudios, se diría que el cielo se ha llenado de cometas.

LA NADADORA

EL ACTOR
.
Vive fuera de él, siempre es distinto, nunca el mismo. Al ritmo de un cambio de acto, se desplaza y su movimiento modifica el paisaje. Capaz de convertir cada cota en máscara de carnaval, crea a su paso una geografía del sentimiento que conmueve, expía, canaliza. Conoce su recorrido letra por letra, no improvisa si no se lo exige su guión. Él es la mentira, la quimera y el reflejo de todo aquel que se detenga a observarlo.

EL ARTISTA PERFORMATIVO

LA ORQUESTA



.
Por [toda la plataforma] hay esparcidas pequeñas unidades individuales. En realidad, son parte de una orquesta completa. Montados sobre un gran engranaje que transporta la melodía, los músicos tocan bajo una techumbre que envuelve el sonido y les transmite el reflejo de otros miembros de la orquesta. La envolvente es a la vez cubierta y espejo, abrigo y director de orquesta.

EL SOLISTA



Al solista se le reserva el interior de una estructura, un espacio en altura. Se mueve a través de un pentagrama. Habiéndole sido otorgado el don de la improvisación, es un artista privilegiado que puede decidir dónde trabajar y hacer sonar su música. A modo de parásito, se aferra al músico de la orquesta al que quiera acompañar. Un altavoz con forma de embudo atraviesa el techo de cada habitación para transmitir el sonido al exterior. Él, inmerso en su cápsula anecoica, se escucha sólo a sí mismo. Quienes quieran escucharlo tendrán que acudir a las proximidades del embudo y saber discernir su prodigiosa melodía de la monótona sinfonía de la orquesta y del sonido de las máquinas que mueven el arte. Uno puede imaginar [la plataforma] llenándose a través de los altavoces de una cacofonía de composiciones diferentes.

LA BAILARINA

EL FOTÓGRAFO


EL POETA

El arte se mueve. El poema es fricción. Movimiento de lugares, de aristas, de espectadores y de obras. Las obras se tocan y se dejan ver, los lugares de paso de un nivel son perceptibles desde el nivel superior, y así sucesivamente. Las obras se apilan y el resultado busca la transparencia.

La no aceptación de
las borraduras
Y de las inexplicables
Desapariciones

En cualquier momento y lugar

Por todo el mundo.



EL TRAPECISTA


CARACOL MUSICAL
.
.


A los teremines no les gusta descansar. Adheridos al metal, recogen lo que el mar desecha mientras su melodía se acopla al llegar a la cápsula. Más que cápsula, flor que atrapa, amplifica y reverbera el sonido. Cuando éste logra escapar, sólo puede correr de una infraestructura a otra, encapsulado y servicial. La orquesta lo usa como telón de fondo. Las bailarinas tratan de romper su monotonía pisoteándola a ritmo de pirueta. Un sonido encerrado en espiral que ya ha quedado.

CARACOL ACUÁTICO

.
La coraza que defiende a los acuáticos es una segunda piel dinámica. Respira, se hincha. Sube y baja detrás de la marea y se deja transportar por ella. Acorrala a la plataforma, protegiéndola a la vez de la adversidad.

CARACOL LÍRICO


Las frases se deslizan. Incongruentes al principio, tal vez. Siempre intencionadas, seguro. Lo que unos deciden, otros ejecutan. La velocidad de los vagones supera la del pensamiento. La producción es constante, el silencio incómodo. Una vez asimiladas las frases, pasan a formar parte del decorado. Suben y bajan, entran a formar parte de un mecanismo, se transforman. De esqueleto a cosmética.